3, 2 1… ¡Muévete!

Se acabó la Navidad y toca enfrentarse a la prueba de la báscula (en estas fiestas suelen cogerse entre 2 y 4 kilos) y ponerse manos a la obra para que nuestros buenos propósitos acerca del ejercicio no se queden en simples intenciones.

Como a todo vosotros, a mí también me toca “ponerme al día” con el entreno, ya que estas fiestas me ha sido muy complicado hacer ejercicio y estoy deseando entrenar. Pero seguramente los que no tenéis mucha práctica o estáis en baja forma no sepáis bien por dónde empezar, así que aquí tenéis algunos consejos que os serán de mucha ayuda.

Piensa en positivo. Si de verdad quieres cambiar tu forma física y tu aspecto, tu lema debe ser “lo voy a conseguir”. Y si quieres puedes hacer incluso un ejercicio de motivación frente al espejo: mírate y di en voz alta que lo que ves va a cambiar, que quieres hacerlo y lo vas a conseguir. ¿Más motivación? Visualízate en un momento del pasado en el que te encantaba tu aspecto. Con ejercicio, ¡puedes volver a estar igual!

Empieza ya. Ni mañana ni pasado ni cuando tengas más tiempo: ¡hoy! Y para ayudarte a cumplir tu propósito, nada mejor que ponerlo por escrito y bloquear en tu agenda los días que vas a hacer ejercicio. Si tu problema es la falta de tiempo, una forma muy fácil de empezar hoy mismo es apuntarte a un gym virtual, como Telegim.tv.

running

Pequeñas metas. Lo peor que puedes hacer el primer día de entreno es darte una gran paliza, no te quedarán ni fuerzas ni ganas para repetir. Sé realista y empieza con metas pequeñas. ¿Quieres correr? Comienza caminando y luego trotando suave unos diez minutos. 15 o 20 minutos el primer día serán suficientes. ¿Quieres entrenar en el gym? Comienza por clases suaves, por ejemplo de yoga o pilates, como las de Telegim.tv.

Descansa. Aunque tengas muchas ganas, no hace falta que entrenes todos los días. Al principio es mejor hacerlo en días alternos para que tu cuerpo se recupere. Y si estás súper motivado y quieres hacer más, plantéate un paseo, una sesión de estiramientos o de yoga, algo suave que no te agote.

Come bien. El ejercicio es maravilloso y enseguida notarás una gran mejora de tu salud, pero si no lo acompañas con una dieta saludable, te costará bajar de peso. Haz cinco comidas moderadas al día, incluye muchas frutas y verduras y bebe toda el agua que puedas. Y nunca te saltes el desayuno…

Entreno inteligente. Para que tu entrenamiento sea completo debes combinar sesiones de fuerza y cardio con trabajo postural y estiramientos. A veces nos obsesionamos mucho con el cardio, sobre todo si queremos perder peso, pero será el entreno de fuerza el que más te ayude con la báscula, ya que el músculo consume mucha energía y mantendrá tu metabolismo siempre alto.

chico musica

Si no disfrutas, no perseveras. Cuando me preguntan qué tipo de ejercicio es el mejor, siempre digo que el que te haga pasártelo bien, desconectar y sentirte bien al terminar. Lo ideal es probar diferentes disciplinas, opciones y hasta profesores hasta encontrar la actividad que vaya contigo, que siempre te haga tener ganas de repetir. Por muy de moda que este el running, si para ti correr es un sufrimiento, no lo hagas, nada, haz yoga, baila…

No dependas de un gym. Apuntarse a un gimnasio es una gran idea, sobre todo porque allí encontrarás profesionales que te asesorarán y te ayudarán a recuperar la forma. Pero mi consejo es que tengas otras opciones para que puedas entrenar si un día no tienes tiempo, si se te pone malo un niño o tienes que viajar. ¿Dos buenas alternativas? El running (o la caminata rápida si no te va el impacto) y un dispositivo con conexión a internet para poder seguir una sesión de ejercicio online en cualquier momento y en cualquier lugar.

¿Estáis decididos a que éste sea un gran año fit? Os recuerdo una de mis frases preferidas y que a mí me motiva muchísimo: “no hay nada que empeore con la edad, que no mejore con el ejercicio”.

12 hábitos para ser más feliz en 2016

Termina el año y es el momento de hacer nuestros buenos propósitos para el que viene. Yo no suelo proponerme demasiadas cosas porque luego no las cumplo. Pero este año me han enviado una lista de hábitos mindfulness desde Artiem Fresh People que me ha gustado mucho y que me parece fácil de cumplir y, sobre todo, genial para disfrutar de una vida más feliz. Porque, como dicen estos expertos en cultura slow, “vivir una vida plena, satisfactoria y feliz no es sólo cuestión de suerte, requiere bastante fortaleza, modestia, mucho trabajo y buen humor”. Aquí van, ¡espero que os resulten tan inspiradores como a mí!:

Cuida tu cuerpo. Deja de fumar, haz deporte, camina a diario, come y duerme bien.

Cuida tu psique. Escúchate, obsérvate, con gentileza y compasión, conviértete en tu mejor amigo. Reconoce cuando te has esforzado y prémiate, mímate. Perdona a los demás y perdónate a ti mismo cuando te equivoques. Date tiempo.

Sonríe y se amable. Trata a las personas con cariño, respeto y humor, principalmente a tu persona.

Escucha. Disfruta de la conversación de cualquiera, mantén la mente abierta a los demás saberes y puntos de vista sobre el mundo.

medita

Sé asertivo. En 2016 también habrá que decir que no.

Vive sin miedo. No te preocupes. Los problemas son desafíos y los pensamientos son como trenes que pasan por la estación de tu cabeza y a los cuales no tienes por qué subir… Tú no eres tus pensamientos.

Lee. Toca un instrumento. Canta. Baila. Apuesta por los hobbies y actividades extra-productivas.

Cultiva el ahora y saboréalo. La consciencia plena  es nuestro mayor objetivo.

Practica la gratitud. Aprecia la vida y todo lo que te ofrece. Antes de irte a dormir, recuerda todos los momentos buenos que has tenido a lo largo del día.

Medita. Hay distintos tipos de meditación como yoga, hipnosis, relajación, afirmaciones, visualización o simplemente quedarse en completo silencio.

Acepta las cosas tal y como son. Es una tendencia muy humana el desear cosas mejores a las que tenemos. Pero una persona Mindful, que es consciente de sí misma, no juzga.

Desdramatiza. Las personas más felices cultivan el humor y se ríen de sí mismos porque nadie es perfecto.

¡Feliz 2016!