Cómo montar económicamente tu gimnasio en casa

Montar un gimnasio en casa es sin dudas un gran reto, sobre todo a la hora de escoger equipos para ejercitarse. Para comenzar, además de tus intereses específicos, todo dependerá del tamaño de la habitación en la que construirás tu gimnasio.

Si al menos cuentas con 10 o 12 metros cuadrados en un lugar bien ventilado, será suficiente para trabajar incluso en múltiples vertientes, considerando el espacio relativamente pequeño que ocupan los equipos para ejercitarse. Ahora bien, veamos una pequeña muestra de lo que podría caber allí por separado, aunque sería muy útil combinar algunos.

EQUIPOS CARDIOVASCULARES

Bicicleta Ciclo Indoor (Spinning) y/o Bicicletas Estáticas : Excelente para entrenar en casa los días que no puedes salir a pedalear al aire libre y/o mejorar tu forma cardiovascular así como perder peso si lo necesitas. Recomendamos las Bicicletas de Ciclo Indoor ( o Spinning ) mejor que las Estáticas convencionales ya que gracias a su volante de inercia tienen un pedaleo asistido muy parecido al de cualquier bicicleta de calle normal. Precios muy aceptables.

Cintas de Correr oCintas de Andar: Pues eso, a hacerlo en tu gimnasio en casa y a la velocidad que os plazca, sin miedo a los huecos imprevistos del parque o la acera. Los precios varían con la calidad y las prestaciones informáticas.

Elíptica: Las hay muy caras y de última generación con pantallas enormes y sensores paramétricos, pero también mucho más baratas. Por ejemplo la  BH-Athlon G2334 no supera los 400.00 € y resulta ideal para un gimnasio en casa. Por su enorme versatilidad, seguridad para las rodillas y larga vida útil, estas máquinas se han puesto de moda en todo el mundo.

EQUIPOS DE FUERZA

Bancos y Multiestaciones: Para un desarrollo muscular más enfático y localizado, nada mejor que una de estas multiestaciones. Permite realizar decenas de ejercicios diferentes. En cuanto al espacio, son un poco más exigentes que el resto de los equipos para ejercitarse.

Banco multiejercicio: Además de los clásicos abdominales y lumbares, los más completos traen pesas y extensores. Por demás, muy confortables y baratos. Con apenas unos 90.00 € se podrán encontrar los más asequibles.

OTROS MEDIOS

Balón fitness: Nunca estará de más alguno de ellos aunque sea para un efectivo estiramiento después de las sesiones, además de que sirven para fortalecer los músculos del abdomen y la espalda.

Plataformas vibratorias: Multiplican la efectividad de cualquier ejercicio que se realice sobre ellas, pues la vibración pondrá en movimiento hasta los tejidos y músculos menos más difíciles de ejercitar. Si tiene movimientos en los tres ejes tanto mejor, así como distintas posiciones de frecuencia seleccionables.

Manual de elíptica para impacientes

Te acabas de comprar una bicicleta elíptica y trae un extenso manual de usuario pero tú quieres comenzar ya… entonces este manual de elíptica es para ti.

1-      1-  Súbete al equipo y agarra con las manos los bastones. Al principio te podrán parecer un poco separados con respecto a los de tu bicicleta común pero enseguida te acostumbrarás.

2-      2- Coloca cada pie sobre los respectivos pedales, siempre de forma paralela al borde interior de los mismos. Verás que ceden a tu peso y que con el descenso de aquellos también se mueven los bastones… no es más que una buena señal.

3-     3- Endereza la espalda y mira al frente; desde esta posición podrás comenzar a pedalear/caminar lentamente, para familiarizarte con la maravillosa mecánica del movimiento elíptico.

4-      4- Asegúrate de que los abdominales tomen parte. Mientras empujas con las piernas los músculos del abdomen deberán contraerse, evitando así, junto con los brazos en movimiento, la sobrecarga de las articulaciones de las rodillas. Ya estás en camino.

5-      5- Si te gusta el ajuste con que has comenzado a pedalear felicidades. Unos 20 o 30 minutos tres veces por semana serían un buen estreno. Luego puedes ir subiendo poco a poco la resistencia  para que trabajen un poco más duro los músculos de las piernas ( cuadriceps e isquiotibiales ).

6-     6- Pero siempre trata de que tu trabajo en la bicicleta elíptica involucre a todo el cuerpo de manera fluida y armónica. Es la mejor manera de aprovechar las ventajas de este aparato básicamente aeróbico, aunque capaz de intensidades muy superiores a cualquier otro de su tipo.

8-      7- Si tu bicicleta elíptica viene con sensores para parámetros cardiacos puedes usarlos o no,  pero si estás en un plan cardio será imprescindible.

Y si aún no tienes una bicicleta elíptica en tu casa, te cuento que existen de diversos precios, marcas y modelos. Puedes adquirirlas en nuestra Tienda Online desde una Conceptgym con volante de inercia de 8 Kg por 250.00 € hasta la muy profesional SALTER, con pantalla matriz y teclado de control, por unos 3,700.00 € Todo un universo donde escoger… sin que ninguna variante vaya a defraudarte.

Y una vez familiarizado con tu bicicleta elíptica, te puedes animar a seguir nuestras video clases de elíptica ( virtual walking ) en el siguiente enlace : Ver Video Clases de Elíptica Indoor / Indoorwalking

Cinco ventajas del ejercicio en casa

Son muchos los famosos que entrenan en sus casas. Frédéric Delavier es autor del best-seller  Strength Training Anatomy y uno de los convencidos sobre las ventajas del ejercicio en casa. Según plantea, con el predominio del ejercicio cardiovascular se han ido perdiendo los buenos gimnasios de pesas, por lo que se ha hecho el suyo a la medida.

Con el abaratamiento de los aparatos para ejercicios, por un lado, y la informatización acelerada por otro, hoy no resulta ni complejo ni demasiado caro montarse un gimnasio bien equipado en un cuarto de casa. Pero analicemos algunas de las ventajas del ejercicio en casa que defiende Delavier.

Ahorro de tiempo.

El solo hecho de tener que vestirse, ir al Gimnasio y volverse a cambiar para comenzar a entrenar resulta cuando menos cansón, sin contar que al finalizar las sesiones habrá que desandar todo el camino. Todo un rollo, que a veces consume más tiempo que la propia rutina de ejercicios.

Trabajo más concentrado.

Es cierto que en los gimnasios se socializa, pero casi siempre a costa de un trabajo intenso y concentrado. No es posible hacer el ejercicio correctamente, por ejemplo, pedaleando sobre una bicicleta o hacer abdominales colgados de una barra mientras se conversa sobre fútbol con el compañero de al lado. En cambio, la soledad de la casa nos permitirá una concentración plena y por supuesto…

Mejores resultados.

Porque además de lo expuesto en el punto anterior, está el tema de los aparatos para ejercicios. Según Delavier, los gimnasios tienden a priorizar la belleza exterior de dichos artefactos por sobre su efectividad. Y es que como norma los dueños de gimnasios tienden a enfatizar el aspecto social y divertido de sus locales. Es por ello que trabajando en casa habrá un mayor chance para mejores resultados.

Menor riesgo de lesiones.

A casi todos nos gusta sobresalir, especialmente a los chicos frente a las chicas. Es por ello que en los gimnasios a algunos les resulta tentador hacer mucho más de lo que deberían. Si se levantan pesas, intentan con discos más pesados; si se trata de algún ejercicio cardiovascular, lo llevan a extremos anaeróbicos;  si la sesión es de elasticidad, pues intentan parecer de goma… y ahí vienen las lesiones inesperadas. Nada de ello sucede frente al espejo de hacer ejercicio en casa.

Mayor higiene.

La diaria concentración de personas en los gimnasios, junto a las altas temperaturas y la elevada humedad reinantes,  facilitan la proliferación de hongos, virus y bacterias sobre alfombrillas, manubrios y duchas. Y no es que sean muy frecuentes los casos de infecciones adquiridas en los gimnasios… pero en casa todo es más seguro y limpio.

Cuatro lecciones para un vientre plano

El vientre ( abdomen ) es la principal región que utiliza el metabolismo masculino para almacenar los excesos gastronómicos convertidos en grasas. En la mujer, se acumula además en las caderas, los glúteos y las piernas.  Pero veamos algunos consejos para mantener un vientre plano, más allá del empleo de los bancos de abdominales.

El balance calórico.

Cuando el valor calórico de los alimentos que digerimos no supera el valor calórico de lo que gastamos en una unidad de tiempo, se dice que el balance calórico es equilibrado o negativo. Entonces no habrá acumulación de grasas y por tanto el vientre se mantendrá plano, aún sin realizar ejercicios físicos. No queda otra que seguir muy de cerca esta ecuación, a diario y cuantitativamente si es posible… pero en ocasiones un buen balance calórico no basta.

El balance hormonal.

Por que a veces el vientre se abulta sin que haya motivos aparentes para ello. Y es que, en el hombre, con el descenso natural de la testosterona la barriga crece, con independencia de cuánto comamos. De hecho, una dieta muy baja en carbohidratos reduce los niveles de testosterona. Así que habrá que encontrar el balance nutricional adecuado y por supuesto, introducir o mantener el nivel de ejercicios físicos.

Para ellas la cosa cambia un poco, debido a su diferente cuadro hormonal. El estrógeno y la progesterona resultan favorables (aumentan la sensibilidad a la insulina y disminuyen la reacción al cortisol), mientras que la testosterona y el cortisol deberían mantenerse a bajos niveles. Nada mejor que la consulta de un endocrinólogo después de los cuarenta.

El ejercicio adecuado.

Hay muchos tipos de ejercicios en cada una de sus categorías, pero para mantener o desarrollar la musculatura ventral un Bancos y Multiestaciones resulta ideal. Sobre alguno de estos equipos podrá ver literalmente formarse sus músculos y de paso aumentar la capacidad metabólica de su organismo, todo lo cual redundará en un vientre plano.

Para ellas valen también los bancos si de abdominales se trata, pero darán mejor resultado integral si se alternan con ejercicios que disminuyan el estrés. Y es que la tensión continuada en las mujeres sube los niveles de cortisol y testosterona al tiempo que afecta al estrógeno y la progesterona, favoreciendo la acumulación de grasas. De ahí lo doblemente útil para ellas que se acerquen al yoga como alternativa anti-estrés.

El alcohol.

Una copa o un par de cervezas no le hacen daño a nadie… a no ser que las dosis comiencen a crecer excesivamente. Y es que el alcohol, además de causar un descenso en la testosterona (la hormona que nos evita la barriga), es un carbohidrato líquido concentrado, lo cual facilita su ruta metabólica hacia la grasa ventral. Como si fuera poco se descompone en acetatos, el mismo producto final de los azúcares, facilitando su conversión en grasa por sobre su empleo energético directo.