Nadie puede negar lo rico que es comer, no importa el momento ni la ocasión, es el acto más íntimo y satisfactorio. Pero en Navidad puede que todo se descontrole y comiences a comer demás y todo lo que pudiste trabajar en el gimnasio o lo que te pudiste cuidar, lo eches por la borda porque no hay duda que la mejor comida es la de esta época tan hermosa del año.
Navidad es compartir recuerdos, sentimientos, alegrías, regalos y una rica cena y deliciosos dulces en la mesa, junto amigos, compañeros o la familia. Y muchas veces no te das cuentas cuantas calorías demás estás sumando a tu dieta diaria. Te dejas llevar por la emoción y la ansiedad del momento de volver a probar esos dulces que solo evocan buenos momentos y es allí cuando tu cuerpo empieza a disparar señales de alerta.
Para nadie es un secreto que la comida de Navidad es una de las más altas en contenido calórico y si no, empieza a analizar cada uno de esos dulces y platos que sirven casi a diario en las mesas durante el mes de diciembre. La suma de cada kilocaloría puede sorprenderte más de lo que te esperas. Con esto no quiere decir que te prives de ellos, pero si es necesario un control.
Dulces de Navidad encabezan lista de productos con más calorías
Si bien el Roscón de Navidad o de Reyes es el Rey de las cenas y los compartir en diciembre, es también uno de los productos con mayor calorías, pues solo cada porción puede contener mínimo 250 calorías, esto si no tiene relleno. Pero muy cerca de esta delicia típica está el Panettone con 375 calorías por cada 100 gramos que llegues a consumir, y sabemos que un pedazo no será suficiente.
Los mantecados y las almendras confitadas llevan la corona en esta lista poco alentadora de productos con mayor caloría que se suele comer en Navidad. Entre 460 y 475 calorías respectivamente contienen cada 100 gramos de cada uno de estos bocados. Pero estos no vienen solos, los polvorones, bombones y mazapanes comparten un alto contenido calórico que se pasean entre las 90 y 150 calorías.
La cena de Navidad también suma calorías
A los dulces típicos de la Navidad con el más alto contenido calórico, hay que sumarle lo que se supone vino antes del exquisito postre, la cena o las comidas de Navidad. Aquí se puede acumular una gran cantidad de calorías, pues por lo general se llega a consumir una variedad de productos que en presentación y preparación y no discriminan cuerpos o metabolismos.
Desde los vinos y los refrescos que por cada dos copas ambos suman más de 400 Kcal. Seguido de las lonchas de queso y jamón con más de 300kcal. Y para completar el menú una rica carne, que aunque baja en grasas con la salsa y los acompañantes pueden sumar más de 350Kcal por plato. Como siempre la idea no es prohibir, es hacer conciencia de lo que se come y lo que no, para equilibrar y reforzar esos resultados en el gimnasio.