Las pantorrillas son la sección posterior de nuestras piernas, justo por debajo de la corva, que a su vez se encuentran detrás de nuestras rodillas. Es un músculo caracterizado por ser carnoso, porque la conforman el tríceps sural ( comprendido por los músculos gemelos externo e interno ) y el sóleo. De forma conjunta, las pantorrillas tienen como función el soporte de nuestro peso, independientemente del lugar por donde queramos ir, razón por la que el desarrollo de las mismas implica tiempo y esfuerzo, pudiendo ser muy doloroso al principio. Hay ejercicios que pueden servir para el desarrollo de este musculo.
Uno de ellos son las elevaciones de pantorrillas mientras permaneces sentado, movimiento con el que se trabaja el músculo sóleo. Para ello, debes sentarte en el aparato procurando tener la planta del pie extendida, para que los dedos queden hacia la parte más baja de esta plataforma, mientras que los talones se ubican por fuera. Entonces, los muslos en su parte más baja estarán abajo del mango acolchado, mientras que las manos las puedes poner por encima. Con los muslos, tienes que presionar la almohadilla del mango levantando los talones, para volver a bajarlos de forma lenta mientras tienes flexionados tus tobillos. Es un excelente ejercicio, que al hacerlo con cierta frecuencia, tus pantorrillas comenzarán a cambiar porque tendrán una mejor masa muscular.
Las elevaciones de pantorrillas también puedes hacerla de pie, para lo que si estás en un gimnasio, necesitarías una plataforma de step o usar un aparato que es diseñado para este fin. Por ende, debes colocar la parte delantera de la planta de tus pies en la plataforma, mientras que el resto queda suspendido en el aire, para que te eleves sobre tus metatarsos lo más que puedas, buscando ponerte de puntillas, generando una contracción de los músculos de las pantorrillas al estar en el punto más alto. Mantén por unos segundos esta posición para que bajes al punto inicial.
Otra manera de efectuar elevaciones de pantorrillas, es mediante el empuje con las piernas. Para ello, tienes que sentarte en un aparato donde se haga el empuje de piernas, y sujetar la plataforma para los pies con la parte delantera de los mismos, mientras se contraen las pantorrillas. Cuando hagas cada repetición, tanto las caderas como las rodillas tienen que permanecer en la misma posición a medida que bajes tus talones cuando flexiones los tobillos. Para que hagas bien este ejercicio, tienes que procurar que el peso se cargue sobre las pantorrillas, sin flexionar las rodillas o emplear otros músculos para hacer presión sobre esta plataforma. Si lo quieres hacer con más dificultad, entonces puedes añadir más discos de peso.