Las enfermedades mentales crecen como nunca antes. Según Wikipedia, en los Estados Unidos se estima que hasta un 46% de los norteamericanos sufrirá de alguna de ellas en cierto momento de sus vidas. Ahora mismo, la ansiedad afecta a casi un tercio de la población, la incapacidad para controlar los impulsos a una cuarta parte de ella y las alteraciones del estado de ánimo a un 21%.
Pero hay una buena noticia: podemos evitar las enfermedades mentales simplemente realizando ejercicios físicos de forma sistemática. Lo aseguran de buena tinta los entrenadores y lo confirma la experiencia diaria en todo el mundo… pero también la ciencia dice lo suyo.
Un estudio realizado por Rachael Stone, de la Universidad de York, Inglaterra, halló que entre quienes se ejercitan por 30 minutos diarios el riesgo de adquirir enfermedades mentales es de un 15% menor con respecto a quienes llevan una existencia sedentaria.
Pero eso no es todo. Los que se entrenan en grupo reducen el riesgo de alteraciones del estado de ánimo hasta en un 45%, mientras que aquellos que hacen ejercicios tanto en grupo como individualmente lo reducen en un 59%, siempre con respecto a las personas que no se ejercitan.
El estudio se realizó sobre la base de la participación de unas 44,000 personas en el Canadian Community Health Survey, una encuesta masiva anual sobre aspectos de salud y estilos de vida en Canadá. Según Stone, los beneficios mentales del ejercicio físico bien podrían compararse con los obtenidos con la sicoterapia.
Pero, ¿qué tipo de ejercicio es el más adecuado para comenzar? Los ejercicios aeróbicos se perfilan como ideales para un buen comienzo, sin menospreciar ningún otro. Resulta que el aerobic, step, zumba ( bailes latinos en general ) etc… puede realizarse prácticamente por cualquier persona –previo consentimiento médico en algunos casos.
Los ritmos y frecuencias de los ejercicios aerobios son ajustables a cada individuo, sus movimientos involucran todos los músculos del cuerpo y por si fuera poco son muy entretenidos y variados, pues se desenvuelven siguiendo patrones musicales.
Por otro lado, son tan baratos como que no requieren de equipamiento alguno y ni siquiera de mucho espacio. El aerobic resulta magnífico para la salud cardiovascular, pues se basa en rutinas prolongadas y poco intensas, generando un ritmo de latidos moderado y seguro.
De manera que, según datos de una de las fuentes consultadas (CTV Television Network), si apenas un 10% más de canadienses comenzaran mañana a realizar sus rutinas aeróbicas por 30 minutos al día, durante el próximo año más de 165,000 personas dejarían de ser diagnosticadas por depresión y ansiedad en aquel país.
Pero igual sucedería en cualquier rincón del mundo, así que usted podría ser uno de los incontables beneficiados con la práctica sistemática del ejercicio físico. Si ya los practica, felicidades; si no es así, debería comenzar cuanto antes.