Gimnasios y tercera edad: la importancia del deporte en la madurez

Gimnasios y tercera edad: la importancia del deporte en la madurez

Aunque la actividad física es importante para llevar una vida saludable durante cualquier etapa de nuestra vida, una vez se alcanza la tercera edad, se vuelve prácticamente un hábito necesario. Se debe a que, a medida que vamos envejeciendo, nos volvemos más dependientes de los cuidados de otros, como si volviéramos a ser niños. Acudir a los gimnasios constantemente puede ayudarte a prevenir ese momento inevitable.

Además, la madurez es la etapa clave en tu vida que debes aprovechar para asegurar que tu envejecimiento sea saludable, y te asegure una vida que sea llevadera incluso en los años más avanzados. Sin embargo, aparte de potenciar la autonomía e independencia, los gimnasios y el entrenamiento físico ofrecen muchas otras ventajas para las personas que ya van entrando en la adultez o se encuentran durante la tercera edad.

Beneficios de acudir a gimnasios durante la tercera edad

Sabemos que cuando uno se adentra en la tercera edad, realizar entrenamiento físico no es tan fácil como cuando se es más joven. El cansancio y la fatiga suele golpear antes de lo esperado, los dolores luego de ejercitar son más prolongados, y el desarrollo muscular no es tan rápido como antes. Sin embargo, si decides acudir a gimnasios con frecuencia y superar todos estos obstáculos, podrá observar grandes ventajas:

Tu circulación se verá muy favorecida

Una de las principales afecciones que aquejan a personas de la tercera edad tienen que ver con la circulación, tales como las varices y la tromboflebitis. Entrenar de forma constante en gimnasios, realizando ejercicios de cardio o de levantamiento de pesas, ayuda a mantener la sangre moviéndose de forma rápida y constante. Gracias a eso, los problemas circulatorios no son tan frecuentes, y también se reducen los dolores relacionados con esas enfermedades.

Las enfermedades cardiovasculares también serán menos frecuentes

Afecciones como la trombosis y la hipertensión son otras muy comunes durante la tercera edad, así como enfermedades respiratorias y digestivas. Por suerte, el ejercicio en gimnasios es una solución todo en uno. Con tan solo una hora de entrenamiento al día, pondrás a trabajar a tu organismo las horas suficientes para que estos padecimientos ya no sean un problema inminente.

Potencia la seguridad en ti mismo y tus relaciones

Para nadie es secreto que realizar ejercicio físico de forma constante puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y confianza en uno mismo. Pero aparte de esto, también te permite expandir tus relaciones sociales, incluso cuando ya te encuentras en la tercera edad. Por ejemplo, puedes integrarte en grupos o clubes que se enfoquen en tu deporte favorito, como el senderismo. O simplemente optar por asistir a clases de gimnasios, con cursos adicionales de pilates o spinning.

Te ayuda a mantener un peso saludable

Cuando se entra en la tercera edad, perder peso y quemar grasas ya no es tan eficiente y sencillo como antes. Incluso llevar una alimentación saludable podría no ser suficiente. Realizar entrenamiento en gimnasios te ofrece una forma garantizada y beneficiosa de evitar el sobrepeso, controlarlo, e incluso ayudarte a perder esos kilos de más, manteniendo una figura esbelta.

No hay límites de género

Aunque el entrenamiento corporal esté más asociado a los hombres, lo cierto es que las mujeres también pueden obtener los mismos beneficios al asistir a clases de gimnasios. La menopausia es una de las afecciones que todas las mujeres sufren durante la tercera edad, y el ejercicio puede ayudarte a mejorar tu calidad de vida durante esta época. Adicionalmente, podrás enfrentar la pérdida de masa muscular y prevenir la osteoporosis.

¿Dónde entrenar durante la tercera edad?

Muchos adultos de edad avanzada pueden sentirse avergonzados de acudir a los gimnasios debido a una condición física inferior, por poco conocimiento sobre cómo ejercitarse o cómo utilizar las máquinas, e incluso por incapacidad de trasladarse. Por suerte, existen muchas clases virtuales de gimnasio para personas de la tercera edad, una gran ventaja durante la cuarentena o para realizar actividades de forma remota.