Si eres amante del delicioso sabor del café y a la vez te gusta mantener una figura fitness, tienes que conocer cómo se complementan ambos. A pesar de que algunas personas piensen que el café y el gimnasio son enemigos, no pueden estar más equivocados. Puesto que necesitamos un impulso extra de energía para cumplir eficazmente con los ejercicios; y siempre ayuda tomar una taza de café antes de salir de casa.
Asimismo, cuando se practican entrenamientos en el gimnasio a tempranas horas de la mañana, es importante activar la mente y el cuerpo antes de comenzar. Asimismo, cuando destacamos las propiedades del café, no podemos dejar de mencionar los antioxidantes y nutrientes que nos ofrece; ideales para que nuestro rendimiento sea el máximo durante toda la jornada y lo mejor, a un costo bastante accesible.
¿Por qué el café es tan buen amigo en los entrenamientos en el gimnasio?
Según varios estudios realizados por los profesionales, el café es una sustancia beneficiosa que se emplea desde hace años atrás para conferirnos energía. Este aspecto viene perfecto con el tema de los entrenamientos, que se practican en el gimnasio y en todo deporte en general. Sin mencionar que es ideal para quemar grasas de forma efectiva.
Esto se debe a que el café activa y estimula nuestro metabolismo, haciendo que el cuerpo esté activo, quemando más grasas y calorías. Por esta razón y para cumplir con estos propósitos, los expertos recomiendan el café espresso, para que el rendimiento sea el más óptimo. Sin embargo, es importante que este no lleve azúcar adicional, disfrutando así del sabor puro de nuestro café
¿Cómo debo consumir el café antes de ir al gimnasio?
El café es nuestro mejor aliado para sentirnos enérgicos y con vitalidad a la hora de acudir al gimnasio; por lo que es importante saber cómo consumirlo. En este sentido, lo más aconsejable es preparar una rica taza de café, unos 30 minutos antes de comenzar a realizar los ejercicios. Sin olvidarnos de nuestra taza matutina sin azúcar en estado ayunas.
Asimismo, es conveniente que se siga una rutina diaria donde el café no pase desapercibido antes de entrenar en el gimnasio. Puesto que el organismo debe acostumbrarse al ciclo de absorción de la cafeína, consiguiendo así los mejores resultados; siendo un efecto de energía perdurará durante aproximadamente seis horas.
Sin embargo, se recomienda que el entrenamiento en el gimnasio se efectúe los primeros 45 minutos luego del consumo de la taza de café. Ya que este es el tiempo donde la cafeína se concentra mayormente en el cuerpo, generando ese impulso tan necesario. Sin embargo no vayas a abusar de su ingesta, ya que el café podría llegar a convertirse en tu temido enemigo.
Principales beneficios de tomar café antes de acudir al gimnasio
Como ya mencionamos, maximizar los resultados potenciales de cada entrenamiento en el gimnasio, es posible consumiendo café media hora antes de empezar. Al hacerlo, notarás inmediatamente un aumento considerable de la adrenalina, factor importante para tener el mejor desempeño en cada rutina de ejercicios. Asimismo, el corazón y el sistema nervioso se beneficiarán con el estímulo de la cafeína, mientras que tu mente se mantendrá más activa también.
Por su parte, otro de los puntos que hacen que el café sea buen amigo del gimnasio, es que disminuye considerablemente la fatiga; especialmente cuando realizamos diversas series de ejercicios agotadores, dejándonos sin aliento. De este modo, es posible ajustarse a la rutina por más tiempo y así alcanzar la meta de conseguir ese cuerpo esculpido y tonificado.
Sin mencionar que tomar café antes de cada entrenamiento en el gimnasio, también mejora la resistencia en gran medida. Bien sabemos que luego de cada sesión de ejercicios, los dolores musculares no tardan en aparecer; pero con el consumo de café, estos molestos síntomas son más tolerables y el cuerpo se adapta mejor a ellos.
Finalmente, el café es un buen aliado para ayudarnos en nuestro propósito de perder grasa y erradicar esas calorías de más. Dado que nos confiere una sensación de saciedad durante largo tiempo, evitándonos consumir bocados de comida a deshoras; y actúa eficazmente para que el metabolismo libere la grasa acumulada en forma de energía.